
La situación en el norte de la Franja de Gaza ha alcanzado un punto crítico, con la mayoría de los hospitales fuera de servicio debido a un intenso bombardeo, cortes de energía y una escasez de recursos vitales. Desde el inicio del conflicto el 7 de octubre, tras el ataque terrorista de Hamas que dejó más de 1,200 muertos, el impacto en el sistema de salud ha sido devastador. Un análisis reciente revela que al menos 20 de los 22 hospitales en la región han sido dañados o destruidos, lo que ha dejado a miles de civiles en una situación desesperada.
Un Escenario Desolador
Las imágenes satelitales y los videos recopilados por organizaciones humanitarias muestran la magnitud de la destrucción en Gaza. Dos hospitales han quedado completamente arrasados, y los tres centros pediátricos en la zona han tenido que cesar operaciones. Los hospitales que todavía funcionan han sido severamente limitados en sus capacidades, y para finales de diciembre, se reportó que no había hospitales operativos en el norte de Gaza. La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que los pacientes heridos que no podían ser trasladados estaban “esperando a morir”. Esta afirmación pone de relieve la urgencia de la situación y la necesidad de una respuesta humanitaria inmediata.
Los hospitales que han permanecido en funcionamiento enfrentan una crisis de recursos, con un acceso limitado a suministros médicos y personal. Muchos de estos centros han dejado de realizar cirugías, y el personal médico está trabajando bajo condiciones extremas, utilizando linternas para operar durante los apagones. En medio de todo esto, los pocos pacientes que quedan enfrentan una creciente incertidumbre sobre su atención médica.
Desmentidos y Acusaciones
Israel ha argumentado que Hamas utiliza hospitales como bases de operaciones militares, y ha lanzado ataques para neutralizar estas amenazas. Sin embargo, representantes de la salud en Gaza han desmentido estas afirmaciones, subrayando que los hospitales deben ser espacios protegidos bajo el derecho humanitario internacional. Las acusaciones de uso indebido de hospitales por parte de grupos armados deben ser investigadas, pero no justifican el ataque a instalaciones que sirven a la población civil.
El Comité Internacional de la Cruz Roja ha enfatizado la obligación de los atacantes de tomar todas las precauciones posibles para proteger a los civiles y a las instalaciones médicas. La dificultad para evacuar a los pacientes heridos ha sido una de las principales preocupaciones, y las organizaciones humanitarias han instado a las autoridades a garantizar la seguridad de todos los involucrados.
El Papel del Derecho Internacional Humanitario
La protección de hospitales y el personal médico es un principio fundamental del derecho internacional humanitario. Atacar instalaciones médicas es ilegal y, según el derecho internacional, los responsables de tales actos pueden ser considerados culpables de crímenes de guerra. En este contexto, es crucial recordar que la vida de los civiles y la atención médica no deben ser utilizadas como herramientas de guerra.
El derecho internacional establece que un hospital puede perder su estatus protegido solo si se utiliza para actos que sean “dañinos para el enemigo”. Sin embargo, incluso si se pierde este estatus, los heridos y enfermos dentro del hospital siguen siendo protegidos por el principio de proporcionalidad, lo que significa que cualquier ataque debe minimizar el daño a los civiles.
Impacto en la Población Civil
La crisis humanitaria ha afectado desproporcionadamente a los más vulnerables, incluyendo a mujeres, niños y ancianos. Según informes, muchos pacientes en los hospitales de Gaza han sido evacuados debido a la falta de atención médica. Las familias han quedado atrapadas en un ciclo de violencia, y la posibilidad de recibir atención médica adecuada se ha vuelto cada vez más remota. La escasez de medicamentos y suministros médicos ha hecho que las condiciones de salud empeoren drásticamente.
Llamado a la Comunidad Internacional
La comunidad internacional debe actuar urgentemente para garantizar que se respete el derecho a la salud y la vida de los civiles en Gaza. Es crucial que se realicen esfuerzos coordinados para proporcionar asistencia humanitaria y proteger a los hospitales y al personal médico que aún intenta brindar atención a quienes más lo necesitan.
Los esfuerzos deben incluir la facilitación de corredores humanitarios seguros para la evacuación de pacientes y la entrega de suministros médicos esenciales. Además, es fundamental que las organizaciones internacionales supervisen y documenten las violaciones de derechos humanos y las infracciones del derecho internacional humanitario.
La crisis en Gaza es un recordatorio escalofriante de las consecuencias devastadoras de la guerra. Cada día que pasa sin una solución pacífica y humanitaria exacerba el sufrimiento de los civiles que ya enfrentan condiciones extremas. Es hora de que todos exijamos una resolución que priorice la vida y la dignidad humana, protegiendo a los más vulnerables en tiempos de crisis.
La historia de Gaza no debe ser solo una de sufrimiento, sino también de esperanza y resiliencia. La comunidad global debe unirse para exigir el fin de la violencia y el respeto por los derechos de todos los habitantes de la región.