En un nuevo y escandaloso giro de los eventos, el periodista de renombre Carlos Loret de Mola ha sido acusado de fabricar un montaje durante su cobertura de guerra en Afganistán. J. Jaime Hernández, periodista y corresponsal de guerra, ha revelado con un impactante video cómo Loret de Mola engañó al público, presentándose como un héroe que arriesgó su vida en la línea de fuego.
Un héroe fabricado
Carlos Loret de Mola, conocido por su supuesta valentía en zonas de conflicto, ha recorrido el país compartiendo experiencias de sus coberturas. En sus conferencias, ha sido presentado como un periodista fuera de serie que no duda en arriesgar su vida para obtener la noticia. Sin embargo, Hernández revela que esta imagen es completamente fabricada.
En el video, se muestra a Loret de Mola alardeando de sus transmisiones en Afganistán, donde asegura que estuvo bajo el fuego de cañones mientras transmitía en vivo para México. Sin embargo, Hernández, quien estuvo cuatro meses en el terreno y vivió de primera mano los horrores de la guerra, denuncia que la historia de Loret es un completo montaje.
La verdad detrás del supuesto peligro
Hernández, quien ha visto caer a sus colegas en el campo de batalla y que incluso contrajo neumonía durante su cobertura, sostiene que la narrativa de Loret es una mentira orquestada. Según Hernández, la escena que Loret describe como una hazaña peligrosa no fue más que una coreografía con un tanque soviético obsoleto.
“Cuando llegó Carlos Loret con nosotros y vio el tanque que está disparando dijo ‘¡Ésta es la mía!’, y se bajaron corriendo los tres y ‘hemos arriesgado la vida’”, relata Hernández. En realidad, el tanque no representaba un verdadero peligro, y era parte de un montaje que Loret de Mola aprovechó para crear una imagen heroica y falsa.
Desprecio por los verdaderos corresponsales de guerra
Con indignación, Hernández se pregunta cómo alguien como Loret de Mola puede tener el descaro de engañar al público y deshonrar la memoria de los periodistas que perdieron la vida en el conflicto. “¡Qué poca madre! Ahí murió Julio Fuentes, la colega italiana, el colega alemán, ¡gente murió ahí! Y es insultante para los auténticos periodistas y corresponsales de guerra escuchar a este payaso y sus montajes”, declaró furiosamente.
Además, Hernández expone otra de las mentiras de Loret: las supuestas transmisiones en vivo. Según él, era imposible realizar transmisiones en tiempo real debido a las limitaciones tecnológicas de la época, lo que convierte las afirmaciones de Loret en una burla a la inteligencia de su audiencia.
La caída de un ídolo construido
Hernández se enteró del engaño años después, tras recibir la llamada de un corresponsal de Televisa que le informó sobre las mentiras que Loret de Mola estaba difundiendo. “¿Cómo puede ser tan sinvergüenza alguien así con este tipo de personajes?”, cuestiona Hernández, poniendo en evidencia la falta de profesionalismo y ética de Loret de Mola.
Esta revelación es un duro golpe para la credibilidad de Loret de Mola, quien ha utilizado su montaje para consolidar su reputación como corresponsal de guerra. Hernández finaliza su denuncia lamentando que este tipo de espectáculos sean suficientes para consagrar a alguien como un héroe del periodismo, cuando en realidad no es más que un fraude.
Fuente: polemon.mx
